La Fuerza de Defensa de Guyana (GDF, por sus siglas en inglés) informa del incremento paulatino de la presencia de sus tropas en la frontera con Venezuela, además de la instalación de una base de patrullaje transitoria, a fin de disminuir el tráfico de armas por comida y mitigar la violencia de las pandillas en la zona.
Ante el crecimiento de la violencia y del tráfico de armas y comida, la presencia de las fuerzas guyanesas en la zona limítrofe será “mayor y más constante a partir de ahora”, anunció el sábado el ministro de Estado de Guyana, Joseph Harmon, al portal local de noticias Demerara Waves.
En este contexto, explicó que el Gobierno de Georgetown estaba al corriente de varios incidentes violentos cometidos en la frontera venezolano-guyanesa por parte de algunas pandillas, incluidas varias decapitaciones.
Para hacer frente a dichos actos, el Ministerio de la Presidencia de Guyana afirmó en un comunicado que ha establecido una nueva base de la GDF en el lugar —levantada en 72 horas—, después de ser informado por su servicio de inteligencia de que hay “problemas de seguridad en la frontera debido a la situación en Venezuela”, precisó Harmon.
Por su parte, Brentnol Ashley, presidente de la Región 1 (Barima-Waini), en el noroeste de Guyana, destacó el mismo sábado, a medios locales, que han llegado noticias de que en la zona fronteriza se están intercambiando armas por alimentos, que son “muy escasos” en Venezuela a raíz del bloqueo impuesto por Estados Unidos al país bolivariano.
Asimismo, sostuvo que ha informado al presidente de Guyana, David Granger, de que muchos conciudadanos guyaneses están siendo “atacados y abusados” en esta región.
El Ministerio guyanés de la Presidencia apuntó en su nota que “la presencia militar pretende neutralizar cualquier actividad ilegal y establecer un sistema de vigilancia 24 horas para establecer una seguridad máxima”.
Al respecto, dicha Cartera urgió a los vecinos de la zona a crear patrullas de vigilancia ciudadana, al justificar que “la policía y el Ejército no pueden estar en todas partes”.
El pasado 8 de febrero, también el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ordenó el despliegue de más de 3000 fuerzas, tanto de la Policía como del Ejército, en las fronteras comunes con Venezuela para detener el flujo de migrantes desde la frontera con el país sudamericano, donde creará una unidad especial.
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